El aumento del 25% que tuvo el tipo de cambio tras la PASO tuvo un impacto directo en la aceleración del índice de precios (IPC) de la economía, que se ve reflejado en la inflación mensual de 5,9% en septiembre y de 53,5% interanual, según reveló hoy el INDEC. De esta forma, en el año, el costo de vida acumula un alza del 37,7% y, como ayer señaló el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Argentina se encamina a ser el tercer país con más inflación anual luego de Venezuela y Zimbabue.
El alza mensual de 5,9% en los precios es la mayor desde hace exactamente un año, cuando la inflación de septiembre de 2018 había tenido un pico de 6,5%, producto también del aumento que había tenido el dólar el mes anterior. En este caso, sin embargo, hubo medidas que amortiguaron el impacto: la quita del IVA a 14 productos de la canasta básica alimentaria y el congelamiento de combustibles y de tarifas de gas, luz y transporte.
Por lo tanto, entre los productos que tuvieron variaciones de precios por arriba del promedio se encuentran prendas de vestir y calzado (9,5%); salud (8,3%); bienes y servicios varios (8,2%); recreación y cultura (7,6%); equipamiento y mantenimiento del hogar (7,4%), y comunicación (6,7%).
En tanto, tuvieron un alza por debajo de promedio alimentos y bebidas no alcohólicas (5,7%), bebidas alcohólicas y tabaco (5,7%); restaurantes y hoteles (5,2%); transporte (4,7%); vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (2%), y educación (1%).
“Hubo medidas que contribuyeron a que la tasa de inflación se ubique debajo de 6%, pero no son gratis. Alimentos, que tiene mucho componente transable y por lo tanto suele estar arriba del promedio cuando sube el tipo de cambio, en este caso estuvo ayudado por la quita del IVA. Transporte y vivienda también tuvieron un alza menor explicado por los congelamientos de tarifas”, dice Gabriel Caamaño, de la consultora Ledesma.
“La quita del IVA ya tuvo su efecto en la menor generación de ingresos, mientras que el impacto de congelar las tarifas de luz, gas y transporte se verá en el aumento del gasto a través de la suba de subsidios económicos. En el caso del congelamiento de combustibles, el efecto está en el daño que se le hace al sector, que afecta a las inversiones. Cuánto más transitorias sea la medida, menos daño hará”, agregó el economista.
En el Banco Central indicaron que “la fuerte corrección a la baja de los precios de los activos argentinos y la suba del tipo de cambio tras las PASO interrumpieron transitoriamente el proceso de baja de la inflación que veníamos transitando desde abril pasado. La inflación que había bajado desde 4,7% en abril hasta 2,2% en julio, volvió a elevarse en agosto a 4,4%”.
“En octubre, los indicadores de alta frecuencia muestran que la inflación será significativamente menor a la de septiembre, reflejando que la inflación retomó el proceso de desinflación”, agregaron en la entidad que preside Guido Sandleris.
El dato estuvo en línea con el relevamiento de expectativas de mercado (REM), que publica cada mes el Banco Central, en base a las estimaciones privadas, que habían proyectado para el mes pasado una inflación de 5,8%. Para 2019, el relevamiento proyecta un IPC anual de 54,9%, mientras que las estimaciones del FMI señalan una suba del costo de vida del 57,3%.
“Que el año cierre con una inflación mayor al 50% lo convertirá en el dato anual más alto de los últimos 28 años. Y los precios relativos anticipan que podría haber mayores problemas de cara a 2020. Los salarios posiblemente sigan perdiendo poder de compra y su actualización podría generar aumento de precios vía suba de costos. Las tarifas de los servicios y el transporte no se actualizan hace varios meses y complican la meta fiscal vía mayores subsidios económicos. El tipo de cambio se aleja del punto máximo alcanzado después de las PASO y podría dar otro salto después de las elecciones si el ganador anuncia medidas de mayor control cambiario”, analizaron Nadin Argañaraz y Bruno Panighel, economistas del Iaraf.
En agosto, la inflación había sido 4%, mientras que en julio, el costo de vida había tenido un alza de 2,2% y los analistas esperaban que continúe el proceso de desinflación, pero el salto del tipo de cambio tras las primarios rompió con todas las expectativas.
Fuente: Diario La Nación