El magistrado denunció que dos agentes que estaban en la puerta de su casa estaban alcoholizados. Días antes había encontrado un mensaje mafioso en su despacho
El juez federal de Reconquista, provincia de Santa Fe, Aldo Alurralde fue protagonista de dos hechos graves y curiosos la semana pasada. El primer hecho ocurrió en su despacho, donde halló un mensaje mafioso sobre su escritorio. El último tuvo lugar el fin de semana, donde los dos gendarmes que debían custodiarlo en su vivienda estaban borrachos.
Según publicó el diario digital Reconquista, el sábado por la noche uno de los custodios golpeó la puerta de la casa del juez y cuando el magistrado abrió, el gendarme le dijo “Usted es mi Dios”. Alurralde habló con un superior de los agentes, quien llegó hasta el lugar e intervino.
El titular de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales de Gendarmería encontró a los cabos Manuel Martínez y Carlos Condori García borrachos y en la cuneta, a metros de donde se ubica la casilla de guardia. Allí se halló una bolsa con botellas y cajas de vino vacías.
El superior se quedó con las armas reglamentarias de los dos cabos y los llevó hasta Avellaneda para hacerles un control de alcoholemia. Los dos agentes fueron desafectados de la fuerza de seguridad.
Alurralde el martes pasado denunció que al ingresar en su despacho se encontró con un pájaro muerto y aplastado en el escritorio. Su juzgado es custodiado las 24 horas por Gendarmería.
Fuente: Rosario 3.