Los altavoces inteligentes se están haciendo populares pese a los riesgos de seguridad ya descritos. Por si esos riesgos no fueran ya suficiente para pensarse dos veces su compra, ahora sabemos que, además, estos dispositivos son fácilmente manipulables. Lo último es que han logrado hackear un altavoz inteligente con un puntero láser.
Es lo que ha hecho un grupo de investigadores de la Universidad de Electrocomunicaciones de Tokio (Japón) y la Universidad de Michigan (Estados Unidos). Han conseguido controlar dispositivos como el Asistente de Google, Alexa o Siri apuntando un láser al micrófono del altavoz para que realizase acciones como encender o apagar las luces, abrir puertas e incluso encender un coche como explican en su página web.
Estas acciones se harían mediante órdenes silenciosas, a través de la luz y a más de 105 metros de distancia. Los investigadores cuentan que descubrieron que el micrófono de los altavoces inteligentes responde a la luz de láser como si fuera sonido. Ello es posible a través de una pequeña pieza llamada diafragma que se mueve cuando recibe un sonido.
Mediante el láser encontraron que podían emular el movimiento del sonido y hacer que el sistema actuara como si hubiese recibido una orden. Han descubierto la vulnerabilidad pero al tiempo proponen cómo solucionar el problema. Todo pasa por rediseñar los micrófonos.
Así, proponen el empleo de varios micrófonos en lugar de uno para recoger el sonido, ya que un láser afecta solo a un micrófono. También sugieren reducir la cantidad de luz que recibe el diafragma mediante materiales opacos.
De momento, a la espera de que los altavoces se rediseñen, los investigadores nos dan algunas pautas de seguridad para que nuestro altavoz esté a salvo de estas manipulaciones:
Mantenerlo alejado de la vista de las personas que están en el exterior.
No dar al altavoz permiso y acceso a aquellas acciones a las que no se quiere que otras personas accedan.