Ocurrió ayer a la madrugada en una casa situada en la intersección entre la avenida Las Américas y calle Marcos Caudales del barrio Estación de Santo Tomé. La policía llegó al lugar tras advertir un show de luces y música a alto volumen. Solo pudieron detener a cuatro personas, el resto de los invitados evitaron ser identificados y escaparon.
Desactivaron una fiesta clandestina que se llevaba a cabo en una vivienda particular. Esta vez el operativo se realizó en la localidad de Santo Tomé. Cuando llegó la Policía, hubo una fuga masiva para evitar ser identificados. Detuvieron a cuatro jóvenes y el propietario le cerró la puerta de entrada a los efectivos y no quiso identificarse. Al cierre de esta edición, se aguardaba la orden de allanamiento para requisar el lugar. Se estima que del evento participaron cerca de 100 personas.
El procedimiento se realizó ayer a la madrugada cuando policías de la Comisaría de Distrito Primera de Santo Tomé realizaban sus labores específicas de prevención en el marco de hacer cumplir las medidas por la emergencia sanitaria en esa ciudad.
Con la valiosa colaboración de personal de la Unidad Regional V, sección Alcaidía y Priar de esa ciudad, acudieron a un domicilio ubicado en la intersección de la avenida Las Américas y calle Marcos Caudales del barrio Estación, donde se encontraba un gran grupo de personas con luces y música a alto volumen.
Una vez en el lugar hicieron cesar el evento y procedieron a la demora de cuatro jóvenes mayores de edad, como también secuestraron una motocicleta –marca Honda Twister–.
Posteriormente, tras la comunicación respectiva de lo acontecido, las autoridades judiciales dieron la directiva de que se les inicie actuaciones por supuesta infracción al artículo 205 del Código Penal Argentino, que establece las penalidades para aquellas personas que violen las medidas adoptadas en el marco de la emergencia sanitaria por covid-19.
En el marco de la investigación, la casa permanece custodiada con el fin de resguardar la escena donde se produjo la fiesta. Se esperaba una orden de allanamiento para requisar la propiedad con el objetivo de secuestrar bebidas alcohólicas, luces, equipo de sonido y demás objetos que hayan sido utilizados para el evento. En tanto, el propietario también sería detenido y se intenta determinar cómo fue la modalidad de invitación al evento.
Fuente: Diario Litoral