La interventora del predio del Gaucho Gil, ubicado sobre la ruta 123, Ramona Villalba comentó que “entre cinco o seis locales se están desarmando para tener acceso directo al Santuario para evitar grandes acumulaciones de personas.
Luego del lamentable hecho en el que fallecieron un padre y su hijo a consecuencia, se dice, de los desmanejos en el Santuario del Gaucho Gil, se desmantelaron entre cinco o seis locales del predio.
“Esto ya se había pactado con sus dueños. Ente cinco y seis locales se desarmaron, no son locales míos, yo no tengo nada que ver en lo que sucedió fue una desgracia por eso se va a liberar y limpiar todo” señaló.
Sobre los hechos de violencia que sucedieron días atrás, indicó “hasta ahora no tengo la información de nada, hace 30 años que estoy trabajando en el predio y hay personas que están aprovechando este corte de ruta. Yo hable con los dueños de esos locales para sacar y que quede como antes, que la gente pueda ingresar por allí y así queda liberado el frente”.