La plataforma fue lanzada en los últimos días en Buenos Aires y sus impulsores prevén que en un corto período sea utilizado por un millón de personas.

Hace solo algunos años, imaginar que una persona de Ushuaia podía ser atendida por un médico de Buenos Aires a través de un celular, era algo que sólo podía vislumbrarse en los libros y en las películas de ciencia ficción. Sin embargo, la telemedicina hoy es una realidad que cada vez se impone con más fuerza en Argentina.

Psicología, dermatología, pediatría, cardiología son solamente algunas de las tantas especialidades en la que ya se aplica, aunque, claro, de manera más rudimentaria. Tanto por Skype o Whatsapp los pacientes consultan con los profesionales sobre sus dolencias y se evitan de esta manera tiempo de espera, traslados, y, en definitiva, dinero.

“El problema radica en que, a través de estas redes, la historia clínica se puede perder o incluso puede ser hackeada y esto podría ser un gran dolor de cabeza para el especialista”, preciso Erwin Padinger, fundador y presidente de Meditar, una empresa especializada en medicina de alta complejidad.

Por eso, la compañía presentó recientemente un sistema que promete ser revolucionario. Se trata de una herramienta por la cual, a través de una aplicación que se baja al celular, se puede reservar un turno con el profesional, tener la consulta médica por video conferencia y enviarle al especialista material que sea relevante para la atención, como resultados de laboratorio, imágenes, o informes médicos.

Ventajas de ser portable

“El gran problema de los sistemas de salud en el mundo y en la Argentina también es lo que se llama la fragmentación. Está tan atomizado que si yo voy a un hospital, el pedazo de esa consulta queda en ese lugar. Sólo lo pueden ver ellos, pero no otros hospitales, ni médicos”, explicó el director de la compañía.

Con esta plataforma, apuntan a que esa forma cambie. Y si el paciente tuviera, por ejemplo, un accidente en Rumania, y necesitara ser atendido, puede mostrarle al médico de ese nosocomio su historia clínica y ser convertida automáticamente al rumano, dado que el software contempla la traducción a 108 idiomas.

Vale decir que el sistema requiere de dos partes para funcionar: por un lado que el paciente posea la plataforma y por el otro, que también la tenga el médico. Esto significa que si un profesional no cuenta con esta herramienta, o el centro de salud no lo tiene, deberá ser la propia persona quien tenga que cargar a mano los datos, por ejemplo, de sus análisis, para que la historia clínica quede siempre actualizada y pueda ser leída posteriormente por otro especialista que sí maneje el software.

Sin embargo, hay una arista a considerar. Al tener la posibilidad el paciente de cargar información al sistema, ¿Qué pasaría si interpretara mal un dato o confundiera algún medicamento a la hora de volcarlo? “El error humano siempre puede suceder”, reconoció Padinger aunque aseguró que el objetivo es que la carga por parte del usuario sea ínfima y que cada vez sean más los centros y los profesionales que se sumen a este software.

¿Cómo se utiliza?

Los usuarios del servicio deben contar con una computadora, una Tablet o un Smartphone y una conexión a internet, aunque no es necesario un gran ancho de banda.

Se bajan una aplicación, denominada Telemeditar, o se accede a través de una computadora a la plataforma meditar.encountermd.com y a través de ella el primer paso es registrarse. Luego, se puede solicitar un turno con el especialista que se busca. Se pauta la fecha y hora y el sistema pedirá el motivo de la consulta. Allí se puede agregar cualquier información y archivos relevantes para el médico que lo va a asistir.

Sistema nacional e internacional

Además de la plataforma, la empresa cuenta con estaciones médicas portátiles, que están equipadas con dispositivos periféricos específicos para realizar múltiples estudios. Estos aparatos podrían convertirse en una solución en lugares remotos, barrios o pueblos que no posean un centro de salud dado que es posible trasladarlos a una plaza, a un centro comunitario y a cualquier institución que lo requiera sin necesidad de que sean manejados por un médico y de que se cuente con un recinto equipado exclusivamente para tal fin. Ya hay varias provincias que se mostraron interesados en adquirirlos.

Este consultorio virtual, que se guarda en una valija con rueditas, incluye cámaras de alta definición para ojo, piel, boca y oído; sensores de tensión arterial, de temperatura, de pulso, de oxígeno en sangre y electrocardiógrafo.

Algunos hasta se aventuran a considerar que este sistema no sea solamente utilizado por personas que viven en ciudades alejadas sino también para aquellos ciudadanos de países limítrofes que vienen a la Argentina por turismo médico. De esta manera, sólo necesitan un celular para poder atenderse por un especialista nacional, lo que le permite ahorrar el gasto de traslado.

Temores

Uno de los temas que se desprende de esta herramienta es hasta qué punto los datos del paciente están seguros, dado los constantes programas que existen de hackeo y de robo de datos que podrían poner en riesgo ni más ni menos que toda la información de cada persona.

Por esta razón, la plataforma se nutre de un sistema provisto por la empresa GlobalMed, que suministra programas de atención virtual en salud, y que utiliza el mismo código de seguridad usado ni más ni menos que por el Pentágono, la Casa Blanca, el avión presidencial de Estados Unidos y que usa el propio mandatario norteamericano para hacerse los chequeos médicos.

“Lo que nos interesaba lograr es que todos los pacientes, no importa si era el Presidente de los Estados Unidos o cualquier otra persona, pudieran tener el mismo nivel de seguridad a la hora de preservar sus datos”, sostuvo Joel Barthelemy, fundador de la compañía.

Otro punto a considerar es quién va a absorber el costo. Desde la empresa aseguraron que están en tratativas con varias instituciones, obras sociales, prepagas y organismos para sumarlo como un servicio para sus afiliados. De esta manera, quienes estén en convenio podrán atenderse de forma gratuita o sumándole un importe extra, dependiendo de cómo sea el arreglo hecho entre la compañía y los prestadores. Desde Meditar se mostraron esperanzados de que en un corto periodo cuenten con más de un millón de usuarios y adelantaron que en seis meses será un sistema abierto para todo el que desee sumarse, dado que cualquier persona podrá utilizarlo y abonar el servicio como si fuera una consulta particular.

La plataforma es el puntapié de un sistema que cada vez suma más adeptos en el mundo, que promete ser una revolución en materia de atención médica y que abre las puertas a un vasto número de opciones. ¿Se vendrán las cirugías por celular? La respuesta a este- hoy, insólito- interrogante, quizás, llegue en algunos años.

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