Un hombre murió atrapado en un incendio que destrozó una vivienda del barrio Cichero y dejó a su familia con lo puesto. El sacerdote Cristian Soto, habló con Equipo de Noticias sobre la campaña solidaria en beneficio de la familia afectada.
Días atrás, un hombre de apellido Cabral, de 48 años, quedó atrapado en el incendio al intentar rescatar algunas de sus pertenencias. Su familia quedó desamparada.
María, tiene 8 hijos a cargo, perdió todo por el incendió que perjudicó su casa sobre calle Perú al 150. También sus familiares, que viven al lado se vieron afectados.
A raíz de la tragedia, emprendieron una campaña solidaria. “Afortunadamente, fueron colmadas las necesidades por las donaciones. Incluso mandaron cosas a la parroquia, pudieron regalar cosas a los vecinos necesitados”, dijo el sacerdote.
Además de ropas, calzados, mercaderías y muebles, se recibieron más de 50 mil pesos de donaciones anónimas.
Actualmente, la familia vive a la vuelta de su casa, en una vivienda de un vecino que le prestó. Invico se hizo presente al día siguiente del incendio y está en campaña de refaccionar, hay que demoler y reconstruir.
Sobre Cabral y su familia, el sacerdote expresó que asumieron un compromiso interesante, se sumaron a la vida cotidiana de la parroquia.
“La semana anterior oficializamos el equipo de Cáritas de la parroquia San Juan y pudimos colaborar con esta campaña que fue promovida”, agregó.