Daniel Ruíz Díaz, tiene 11 años y es un niño oriundo de La Cruz (Corrientes). Sufrió mucho durante este año particularmente porque en noviembre del año pasado le detectaron un osteosarcoma en una de sus piernas, por lo que en ese momento comenzó una auténtica lucha contra esa enfermedad que tomó hasta seis ciclos de quimioterapia, con un total de 46 sesiones. Hoy, mucho más recuperado en lo físico y emocional, el niño ya se atreve a dar sus primeros pasos luego del suceso traumático que le tocó atravesar por más de un año.

Daniel Ruíz Díaz es un niño de 11 años de la localidad de La Cruz, pero hay un aspecto que cambió su vida para que ésta deje ser ordinaria y, en pocas palabras, la vida que un chico de su edad debería llevar en los papeles. Y es que a Daniel le detectaron en noviembre del año pasado un osteosarcoma en una de sus piernas que tomó parte del fémur, peroné, tibia y gran parte de su rodilla. A partir de ese momento, la vida de Daniel dio un giro de 180 grados en el que pasó de ser trasladado al Hospital Pediátrico Juan Pablo II de la capital correntina, a ser derivado directamente al Hospital Garrahan en Buenos Aires, lugar en donde está actualmente.

La noticia emocionante de esta ocasión es que Daniel, y luego de atravesar 46 sesiones de quimioterapia, repartidas en 6 ciclos, ya puede dar sus primeros pasos, ya que estuvo imposibilitado de hacerlo por más de un año. “Hoy el niño se encuentra en perfecto estado, gracias a Dios. Hoy terminó su última quimio, por lo que estamos muy felices”, contó el padre del niño, quien también se llama Daniel Ruiz Díaz.

“En este momento está en rehabilitación y ya se puede parar solo, pero todavía falta que el cirujano lo examine de una forma en que pueda tener su rodilla en una extensión acorde para que pueda volver a dar sus primeros pasos”, continuó diciendo el padre del niño. Cabe recordar que en este momento el chico cuenta con una prótesis, ya que raíz de sus tratamientos tuvieron que extirparle parte de su fémur, tibia, peroné y la rodilla completa.

“Desde el 3 de enero que estamos acá en Buenos Aires. Gracias a Dios, con la ayuda de muchísimas personas que fueron ayudándonos de manera anónima con el tema económico pudimos solventar gastos de traslado, comida y demás cosas que fueron surgiendo durante el tratamiento del niño. Así que quiero agradecerles a todos ellos desde acá, al igual que también queremos agradecer a la Fundación Flexer por todo lo que nos dio en este último tiempo”, continuó explicando el padre de Daniel.

“El estiramiento de pierna de él va a ser en febrero o marzo aproximadamente, según lo que dijeron los médicos que lo estudian, ya que quieren que dé al menos 10 pasos por su propia cuenta. Este sábado estaríamos de alta del hospital, para así trasladarlo para el hotel. De ahí, el 3 de noviembre empezaríamos con un mantenimiento de pastillas que lo va a tener que hacer por un año más o menos. Pero si todo va bien, para la primer semana de diciembre ya estaríamos volviendo para La Cruz”, explicó muy detalladamente el padre del niño, a quien se lo notaba muy emocionado.

“Danielito soltó hoy sus muletas y festejó su última quimio y festejó con su brazo arriba, tirando todo lo que tenía. La mamá se derrumbó totalmente, al igual que los enfermeros, a lo que él respondió “¿Por qué lloran si el que debería llorar soy yo?”. Por lo que el llanto se transformó en risas en un momento”, relató el padre del niño en una expresión de emoción muy genuina.

“Quiero agradecer al Gobierno de Corrientes, y especialmente a gobernador de la provincia, ya que hizo intermediar al subsecretario en varias oportunidades. La prótesis estaba valuada en $1.500.000 y se terminó pagando cerca de $2.400.000. Ni bien transmitimos esto al gobierno nos dijeron que íbamos a tener esa prótesis, y la tuvimos en el tiempo correspondiente”, agradeció el padre del niño.

Fuente: Radio Sudamericana

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