La enfermera, de 34 años de edad, dio positivo por Covid-19 el pasado 10 de marzo. Al parecer, temía haber podido contagiar a otras personas mientras trabajaba, algo que ha puesto sobreaviso a la Federación de Enfermería, que denuncia las condiciones extremas de los sanitarios.
La Federación Nacional de Órdenes de Profesión de Enfermería de Italia ha sido la encargada de dar la voz de alarma, a través de un comunicado, de la terrible situación a la que se enfrenta el personal sanitario respecto a la pandemia declarada por la OMS.
Uno de los casos más mediáticos en los últimos días ha sido el de Daniela Trezzi, una enfermera de 34 años de edad, asignada a los Cuidados Intensivos del Hospital de San Gerardo de Monza.
Las autoridades italianas han confirmado que la joven se suicidó tras llevar varias semanas de frenética actividad con el único objetivo de frenar la propagación del coronavirus.
El estrés derivado de esta situación que está viviendo el país, que es el primero del mundo en número de infectados y de muertes, por encima de españa, superó el límite de Trezzi, quien dio positivo el pasado 10 de marzo en las pruebas de Covid-19 y tuvo que someterse a una cuarentena en su casa.
Sus compañeros de trabajo han destacado que Daniela temía haber podido contagiar a alguien sin darse cuenta, algo que la superó, no siendo este el único caso registrado en los últimos días, ya que desde a Federación de Enfermería aseguran que no hace mucho tuvo lugar un incidente similar en Venecia, y ha querido denunciar “las condiciones extremas” a las que el cuerpo sanitario está sometiendose durante esta pandemia.