No es la primera, ni la última persona en comprar cosas en internet y llevarse una desagradable sorpresa. Las publicidades pueden ser engañosas o los artículos no ser los mismos que aparecen en las páginas web, pero lo que también puede pasar es que uno no lea las descripciones.
No compren nada por internet 🤡🤡 pic.twitter.com/8TvFWn2Jrp
— salchicrispi (@karlalgo28) August 6, 2020
Karla, una usuaria de Twitter, conto su experiencia al comprar una bicicleta a un excelente y bajo precio. Cuando la fue a retirar se llevó una desagradable sorpresa, al enterarse que esa ganga que consiguió terminó siendo un adorno. “No compren nada por Internet”, advirtió.