Iniciaron una causa penal a dos hombres que habían convocado a un baile en las redes sociales. Uno de ellos sería integrante de una fuerza.
Un integrante de una fuerza de seguridad nacional y un hombre de nacionalidad brasileña quedaron involucrados en una causa judicial por haber violado la cuarentena obligatoria establecida a nivel nacional ante la pandemia de coronavirus. Ambos fueron demorados por la Policía sindicados como los organizadores de una fiesta que fue promocionada por medio de las redes sociales en la ciudad de Santo Tomé, en la costa del río Uruguay, limítrofe con Brasil, uno de los países más afectados por los contagios de la enfermedad que ya causó 58.400 muertos en ese territorio.
La convocatoria era para una fiesta que habría de llevarse a cabo en un predio ubicado en la calle Sarmiento al 1100 de la ciudad ubicada a unos 390 kilómetros al este de la capital correntina.
Los organizadores estaban conscientes de que la reunión era contra las normas, por ello tuvieron la precaución de advertir a sus invitados: “Dejar los vehículos estacionados a 200 metros para evitar inconvenientes con la Policía”.
Además quedaba claro que carecían de intenciones de comercializar bebidas ya que indicaban que se debía “traer conservadora y consumición”. La fiesta se iniciaría a la 1 del domingo.
El acontecimiento era de conocimiento público porque todo aquel que accedía a la red social Facebook o que recibía un mensaje de Whatsapp, estaba invitado.
Las autoridades policiales también se enteraron y por ello, a poco de iniciar la fiesta, las comisiones policiales llegaron a la vivienda para poner fin a la situación que constituiría contravención a las normas sanitarias extraordinarias establecidas por el Gobierno nacional. “Secuestraron equipos de música y luces. Hay dos involucrados a los que se les inició una causa por violentar el artículo 205 del Código Penal”, informaron fuentes oficiales ayer.
Uno de los involucrados sería un oficial de una fuerza de seguridad y otro, un extranjero que sería propietario del predio donde se inició la reunión en la que al momento de haber llegado la patrulla policial, había al menos 150 personas, informaron medios locales. Interviene la jueza Sara Marina Durand.
Fuente: Diario Norte