Se trata de un complejo dispositivo creado por un joven inventor.

Un joven inventor creó una mascarilla de plástico para hacer frente al momento en que vivimos. Se trata del responsable del canal de Youtube DesignMaker. Con una impresora 3D, dio cuerpo a un primera aproximación a lo que podrían ser los futuros tapabocas. En esta versión, sin dudas, muy perturbadores.

Sucede que esta creación no solo tapa nariz y boca, sino que también cuenta con una pequeña puerta que se abre y cierra. La lógica que sigue para mantenerse bloqueada es simple: que haya gente cerca. Si no hay personas en la proximidad, la trampilla se desbloquea y abre un agujero a través del cual se puede comer y tomar bebidas.

El portal de tendencias y tecnología Gizmodo destaca que este dispositivo cuenta con tres sensores de movimiento. Dos de ellos están a los lados de la boca y el tercero se ubica por detrás de la cabeza. Las ubicaciones permiten cubrir todo el espacio cercano a la persona que porta la mascarilla y detecta a quienes estén cerca.

Para anunciar el cierre de la pequeña compuerta, se encienden luces leds, que siguen un código de programación.

Sorprende el diseño de este dispositivo, pero al mismo tiempo permite pensar cómo serán los futuros tapabocas. Ya se cuenta con algunos de diferentes materiales y diseños, ahora muchos empiezan a pensar cómo mejorar las mascarillas.

Deja un comentario