Tanto Tomás Orduna como Eduardo López sostienen que “en el Área Metropolitana de Buenos Aires hay que poner algún tipo de restricciones”.
Médicos infectólogos coincidieron este miércoles en adjudicar el “duro rebrote” de casos de coronavirus al hecho de haber relajado los cuidados sanitarios, tales como utilizar el barbijo y evitar las aglomeraciones y no descartan “poner algún tipo de restricciones” si el número de contagios sigue aumentando.
Este profesional aseguró que “estamos en un duro rebrote” de casos de coronavirus y agregó que “en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) hay que poner algún tipo de restricciones”, en referencia a posibles medidas que frenen el movimiento de personas o el transporte.
Tomás Orduna sostuvo, en diálogo con radio El Destape, que “de seguir así, la segunda ola que esperábamos para fines de marzo o principios de abril se habría adelantado”.
El profesional, que integra el comité asesor del Ministerio de Salud, indicó que el país atraviesa “una curva en ascenso, hay que ponerle algún tipo de restricciones” y añadió que las campañas apelan “a la conciencia de la misma población que no usa barbijo, y encima le tenemos que decir que se quede en su casa”.
“Espero que podamos hacer algo para que esto sea un rebrote de la primera ola y no el inicio de la segunda ola”, afirmó, y agregó que “no se pueden tomar medidas de media tinta, habría que restringir al menos un tercio del día, desde las 21/22 horas hasta las 6 de la mañana, porque si hago algo muy corto, no cambian las cosas”.
El infectólogo mencionó los rebrotes de casos de Covid-19 en varios países europeos, dijo que “Gran Bretaña comenzó una brutal estrategia de cierre”, e insistió en que a nivel local “evidentemente tenemos que ir por el lado de las restricciones”.
Aunque admitió que el inicio de la vacunación “puede haber actuado de alivio para algunas personas”, afirmó que “la vacuna no es una bala mágica”.
El profesional admitió que con la vacunación “vamos a tener menos cantidad de personas susceptibles a los contagios, la calidad de la ola cambiará porque habrá menos casos graves con demanda de terapia intensiva”.
En coincidencia con Orduna, este infectólogo -también miembro del comité asesor del Ministerio de Salud- manifestó, en diálogo con La 990Radio, que “hemos relajado los controles como si la cuarentena hubiera terminado”.
Eduardo López aseguró que “es muy alto el aumento de casos para considerar una variable azarosa”, ya que explicó que de tener un promedio de 5 mil casos el 5 de diciembre pasamos ahora a tener unos 13 mil.
Si bien, el aumento de los casos se acrecentaron en los últimos días del año, con “la movilización de personas desde el AMBA hacia la Costa Atlántica y desde la Costa Atlántica hacia el AMBA”, el infectólogo explicó que los casos “empezaron a subir ya un poco antes, desde el 8 de diciembre aproximadamente”.
López considera -igual que Orduna- que lo que estamos transitando es “un rebrote de la primera ola”, ya que “no podemos hablar de una segunda porque nunca dejamos de tener casos, es decir, no acabamos la primera”, señaló.
“A nosotros se nos había amesetado la curva y veníamos en descenso, pero el aumento de la circulación hizo que pasara lo que pasó. Es un tema nuestro” aseguró López, y acotó que “de seguir así lamentablemente vamos a tener que hacer algo como pasó en otros países”.
En opinión del infectólogo, es mejor tomar medidas “más temprano que tarde” y estar “atentos a no equivocarnos, mirando lo que sucedió en Europa donde en algunos países la segunda ola fue más dura que la primera”.
Al respecto subrayó que “eso es lo que tenemos que evitar”, y pidió tener un poco de paciencia, estar atentos y no considerar que el problema ya pasó”.
Fuente: Télam