El reality show comenzó el viernes y los 20 participantes deben convivir en un hostal. “Hay influencers y personas comunes”, explicaron desde la producción. La particularidad de este programa es que todos sus integrantes son oriundos de esa provincia.
La provincia de Tucumán vive un verano revolucionado con la irrupción de Gran House Tucumán, una réplica de Gran Hermano, cuyos integrantes son únicamente en esa provincia. Este reality show, que abrió sus puertas el viernes, le dio la bienvenida a 20 participantes; una mezcla de “influencers y personas comunes”, quienes prometen ser los protagonistas de esta nueva aventura que pasó de ser una simple parodia a convertirse en un fenómeno viral.
El productor y conductor del envío, Mariano Villafuerte, expresó su asombro ante la rápida expansión del programa y admitió a FM La Tucumana 95.9: “Esto empezó como una parodia, la broma se fue viralizando. No tiene nada que ver el formato con el Gran Hermano, pero al tener convivencia y 20 participantes, es similar. La diferencia con el reality nacional es que los participantes son dos menos que en el original, van a ingresar y egresar del hostel, no van a convivir 24/7: van a cruzarlos en la zona céntrica o boliches”.
La expectativa social se refleja en la multitud que se aglomera en la puerta de la casa ubicada en Álvarez Condarco 245, donde funcionaba el antiguo Tucu Tucu Hostel. Entre los concursantes seleccionados se encuentran figuras conocidas en las redes sociales y otros menos reconocidos, pero todos ellos comparten el sueño de alcanzar la fama y el éxito.
En cuanto a la dinámica del programa, Villafuerte adelantó que se han preparado una serie de juegos renovados que evocan la infancia, además de debates semanales y pruebas sorpresa con premios para mantener la emoción entre los participantes. Se establecen reglas estrictas, incluyendo la prohibición de celulares dentro de la casa y la necesidad de respeto entre los concursantes.
“Los juegos son renovados. Vamos a viajar a la infancia: juego de la bolsa, juego de la silla y más, para que la familia pueda ver este show”, anticipó el productor, y detalló que los participantes “cinco días de la semana van a entrar por una franja horaria”, y que entre las reglas se establece que deberán compartir “sin celulares en la casa” y por sobre todo “sin faltas de respeto”.
Y explicó: “Un día a la semana habrá debate, pruebas semanales, juegos y se montará un sketch, una especie de novela de cinco capítulos. Si no cumplen las reglas van a placa o quedan eliminados”.
Con respecto a la duración del programa, se espera que se extienda durante tres meses, durante los cuales los espectadores podrán seguir de cerca las intrigas, amistades y rivalidades que surjan entre los participantes. La participación del público tucumano se facilitará a través de Instagram y membresías vía WhatsApp.
¿Hay premio? “Dinero en efectivo para el ganador y las pruebas semanales van a tener premios sorpresa”, precisó Villafuerte.