Sarah McBride acaba de hacer historia en Delaware, Estados Unidos, ya que en esta elección se quedó con una banca en el Senado estatal. Así, se ha convertido en la funcionaria transgénero de más alto rango en el país.

McBride, de 30 años, se ha basado en una carrera que se ha centrado en asegurar la igualdad LGBTQ, trabajando en roles en la Campaña de Derechos Humanos e Igualdad de Delaware, además de las campañas del ex gobernador de Delaware Jack Markell y el ex fiscal general Beau Biden.

Pero si bien se ha basado en la legislación contra la discriminación, le dijo a Vox.com que su campaña se ha centrado en la asequibilidad de la atención médica, la licencia familiar y médica universal remunerada, el prekínder universal y la reforma de la justicia penal.

McBride ha sido objeto de acoso transfóbico, así como de publicaciones de Facebook anti-trans hechas por su oponente. “Los votantes de este distrito son imparciales y juzgan a los candidatos en función de sus ideas y no de sus identidades”, aseveró a medios estadounidenses. “Están buscando candidatos con la imaginación, la energía y la experiencia para afrontar este momento con resultados significativos”.

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