El ascensor en el que viajaban cinco jóvenes que participaban de una reunión social en la madrugada del domingo en un edificio del barrio Echesortu de la ciudad de Rosario colapsó y se desplomó desde el 7° piso hasta la planta baja. Según consignó La Capital todos tienen entre 22 y 33 años y a excepción de una fractura en una pierna, ninguno sufrió lesiones de gravedad a pesar de la violencia del impacto.
De acuerdo con las primeras pericias el ascensor se habría desplomado por una sobrecarga en el peso, ya que la mayoría de los ascensores que hay en Rosario tienen una capacidad máxima de entre 3 y 4 personas. En este caso iban 5.
“El accidente ocurrió alrededor de las 5 de la madrugada del domingo en el edificio donde vive una de las accidentadas. Los jóvenes descendían desde el piso 8 luego de un encuentro en uno de los departamentos cuando se presume que la sobrecarga de peso provocó que el módulo se desplomara y cayera al vacío, provocándole distintas contusiones a sus ocupantes y dejándolos atrapados. El golpe hizo que el ascensor quedara a unos 60 centímetros por debajo del nivel del suelo”, señaló La Capital.
Cuando policía, bomberos y ambulancias llegaron al lugar minutos después se encontraron con que los cinco ocupantes del ascensor estaban encerrados en el habitáculo, ya que el dispositivo tenía una puerta bloqueada por la deformación del choque. Tras cortar la energía, los bomberos cortaron la abertura de la cabina con una barreta especial y un expansor hidráulico para liberar a los jóvenes, que estaban conscientes pero en estado de shock. Junto a personal médico, cada una de las victimas fue rescatada e inmovilizada con cuello ortopédico sobre una tabla espinal, para luego ser trasladadas a distintos efectores.
Dos de los siniestrados fueron derivados al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca) y tres a distintos sanatorios privados, entre ellos el Parque y el Español. Los primeros fueron una mujer de 25 años y un varón de 22, ambos con traumatismos múltiples leves que no revisten gravedad. “Los dos jóvenes llegaron en ambulancia correctamente inmovilizados con collar y tabla, en estado de conciencia, orientados y hablando. Estaban compensados hemodinámicamente y los estudios realizados arrojaron resultados normales, por lo que fueron dados de alta”, aseguró Jorge Vittar, director del Heca. Uno de los jóvenes derivados al privado tenía una pierna fracturada, pero no corría peligro.