La estadounidense Jocelynn James fue noticia al donarle un riñón al policía que la había encarcelado por robos y tenencia de drogas.
“Estaba viviendo una vida muy mala, haciendo un montón de cosas realmente horribles que no debería haber hecho. Era una persona realmente perdida”, recuerda James.
“Hacía cosas que no debía”
Terrell Potter ahora es un policía retirado, pero en la “época loca” de James se encargó de meterla en prisión alguna vez. “Robaba, consumía drogas, hacía cosas que no debía. La encarcelé un par de veces”, señala en declaraciones recogidas por el sitio LAD Bible.
“El Espíritu Santo me dijo en ese momento que tenía el riñón de ese hombre” Han pasado ocho años desde la última vez que James estuvo en la cárcel y ese es el mismo tiempo que lleva desintoxicada y ahora ha salvado la vida de Terrell.
En noviembre del año pasado, los médicos advirtieron a Terrell que su riñón estaba fallando, funcionaba sólo al 5 por ciento, aunque los tiempos de espera para un trasplante eran muy elevados: le dijeron que tendría esperar unos siete u ocho años para obtener uno nuevo.