Un comisario de la Policía de la Provincia de Buenos Aires mató de un tiro a un delincuente que minutos antes había baleado a su hijo, en el partido bonaerense de Almirante Brown. El hecho ocurrió cerca de las dos de la madrugada de este domingo, en calles El Chaja y Frías, donde el jefe policial se encontraba vestido de civil junto con su hijo y un amigo de este, tomando cerveza en un kiosco.
Hasta que un Chevrolet Astra arribó al lugar con al menos cuatro ocupantes, uno de los cuales descendió del auto y realizó un disparo hacia el aire. Ante esta situación, el comisario, identifi cado como Gustavo Rodas (48) y quien se desempeña en la Comisaría 8ª de Lanús, se identificó como policía, a raíz de lo cual, el asaltante realizó un segundo disparo que dio en la pierna izquierda del hijo del efectivo.
Entonces, Rodas repelió la agresión con al menos cuatro disparos que impactaron en el delincuente, un hombre de 44 años que fue trasladado al Hospital de Rafael Calzada, adonde llegó sin vida. En tanto, uno de los delincuentes escapó del lugar a la carrera y mientras que los dos restantes lo hicieron a bordo de un segundo vehículo de apoyo, explicaron las fuentes policiales.
Por su parte, el comisario quedó aprehendido a disposición del fiscal Marcelo Domínguez, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, quien este lunes lo indagará por “homicidio”. Además, Rodas se sometió a un test de alcoholemia.
Hasta el momento, los pesquisas manejan varias hipótesis sobre lo sucedido e intentan determinar si el enfrentamiento estuvo motivado por un intento de robo o un ajuste de cuentas, precisaron los investigadores. A su vez, los peritos secuestraron en la escena del crimen diez vainas calibre 9 milímetros al costado del kiosco y dos cartuchos intactos del mismo calibre junto al Astra, detallaron los voceros.
También se le secuestró el arma a Rodas, un pistola 9 mm Bersa Thunder, que poseía una munición en la recámara y siete municiones en el cargador, y otra arma de fuego del mismo calibre con un proyectil en la recamara y dos municiones en su cargador, propiedad del delincuente.
Según la policía, el delincuente muerto tenía antecedentes por hurto, robo agravado, violación de domicilio y abuso de arma de fuego en grado de tentativa de homicidio.