“Lo que la gente haga en la calle no es un problema nuestro”. “No hay vecinos que se quejen por el funcionamiento del boliche”. “Desde los medios de comunicación hay una conspiración que busca extorsionarnos. Ustedes (los periodistas) son unos ignorantes”. “El pub está clausurado pero hace más de un año presentamos todos los papeles para la habilitación”. Estas fueron algunas de las frases que esgrimió Horacio Luna, propietario de Wara, el local bailable que funciona como “after”, por avenida Maipú al 1500 en cercanías al cruce con Nuestra Señora de la Asunción.
En el programa Equipo de Noticias (LT7 Radio Corrientes AM 900), vecinos y comerciantes lindantes al boliche expresaron su enojo por las dificultades que genera el cuestionado boliche. Autos estacionados en las veredas y frente a los garages, veredas vandalizadas, restos fisiológicos en las puertas, vómitos, botellas rotas, peleas callejeras, ruidos molestos fueron sólo algunas de las complicaciones que encuentran durante y después del funcionamiento del local que tiene una particularidad: abre sus puertas los fines de semana a las 6 de la mañana y se extiende hasta pasado al mediodía.
“Hay una campaña de prensa orquestada por no se quien para ensuciar la imagen del boliche”.
Curiosamente, el local no cuenta con habilitación comercial para su funcionamiento y sobre el emprendimiento pesa una clausura municipal ratificada por la Justicia de Faltas, cierre que Luna desestima habitualmente.
Ya en el programa De regreso, en la misma emisora radial, el controvertido dueño del polémico local esgrimió algunas incomprensibles defensas para sustentar su ilegal actividad comercial.
Dijo que en 2017 presentó toda la documentación para la habilitación como boliche del local pero que la Municipalidad sólo le avaló funcionar bajo la normativa de permiso para eventos especiales.
Luna dijo que “incomprensiblemente” la Municipalidad desestimó el expediente iniciado y lo mandó a Archivo. Dijo que ello ocurrió luego de que un portal de internet expresara “quejas inventadas de vecinos”, según su declaración. Ello obligó a iniciar nuevamente el trámite que, según afirmó, está en Asesoría Legal de la Comuna. “Y ahora que está a la firma, otra vez surgen los cuestionamientos mediáticos”, aseveró.
En este punto, Luna dijo que “lo extorsionan” a través un perfil anónimo de una red social. Sin embargo, nunca expresó en qué consiste tal extorsión ni quienes serían las personas detrás del delito.En este punto señaló que los medios de comunicación se “pusieron de acuerdo” para atacarlo. “Hay una campaña de prensa orquestada por no se quien para ensuciar la imagen del boliche”, fue su concluyente afirmación.
Sobre las quejas de los vecinos, dijo que no hay denuncias de “supuestos” damnificados. “Cuando la Municipalidad hace un espectáculo y va mucha gente, nadie se queja”, retrucó.
Sobre los continuos inconvenientes que se generan en la puerta del boliche, Luna dijo que, primero, la Ordenanza contempla que un local bailable funcione en ese lugar de la ciudad, luego señaló que las peleas (como la que se viralizó en los últimos días de un enfrentamiento a golpes entre dos mujeres) es un problema de la Policía y “si los autos están mal estacionados, lo deben solucionar los inspectores de Tránsito, no nosotros”.
“Lo que la gente haga en la calle no es un problema nuestro. Las quejas que pudiera haber, no nos compete. Son las mismas críticas de los vecinos que viven en el (barrio) Camba Cua cuando hay eventos que organiza la Municipalidad”, argumentó.
“Al after no lo inventé yo. Está impuesto en el mundo. Acá, en Corrientes, hay gente que se levanta a las seis de la mañana para venir a nuestro boliche”, concluyó.