La Justicia recomendó a las autoridades de mesa que no se presenten el día de votación con pañuelos verdes o celestes, que identifican las posturas antagónicas frente a la interrupción voluntaria del embarazo.
La iniciativa busca “evitar enfrentamientos durante las PASO y garantizar un normal desarrollo del acto eleccionario”, indicaron desde el despacho de la jueza federal con competencia electoral, María Servini.
El mensaje es para las autoridades de mesa en su rol de representantes del Estado, no así para los fiscales designados por los distintos partidos para controlar la elección.
Aunque no lo hizo explícito, Servini quiere evitar situaciones como la que atravesó la mediática Amalia Granata en los comicios santafesinos del pasado 28 de abril. Ese día, la presidente de su mesa la recibió con el símbolo de la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito colgado del cuello.
Granata —conocida militante celeste y ahora diputada provincial electa por el frente Unite por la Familia y la Vida— consideró ese episodio como un acto de provocación. “Se lo puso a propósito. Me vio llegar y se lo puso”, se quejó entonces de la utilización del pañuelo verde.
Servini también intentó prohibir en las boletas cualquier tipo de referencia a la despenalización del aborto, pero la Cámara Nacional Electoral terminó revocando su fallo.
El conflicto se había generado por la imagen triangular color verde que aparecía en la boleta de Nuevo MAS, que lleva a Manuela Castañeira como precandidata a presidente. Ese símbolo finalmente fue autorizado. En cambio, los camaristas no dieron lugar al dibujo de un feto que el partido Demócrata Cristiano quería incluir como representación de “la vida por nacer”.
En su momento, la jueza consideró que “las boletas electorales no pueden constituir el lienzo en el que plasmar una discusión que desnaturalizaría la pureza del acto electoral y la genuina expresión del sufragio”. Y defendió su fallo asegurando que el debate sobre el aborto debe darse por otras vías “a fin de evitar que el electorado se sienta agraviado por la exposición de los mismos en las boletas a utilizarse el día de la elección, o que incluso puedan tomar medidas que puedan resultar disvaliosas respecto de estas”.
No es muy distinto su criterio respecto a la utilización de los pañuelos por parte de las autoridades de mesa. Pero esta vez Servini no emitió un fallo sino que se limitó a hacer una recomendación, seguramente para evitar que el tema escale y se transforme en una nueva polémica a tan pocos días de votar.