La información de que el dólar subía y el peso argentino se devaluaba corrió a la velocidad de la luz en la ciudad boliviana de Villazón, donde el 80 por ciento de la actividad económica se basa en el comercio.
Los vecinos de La Quiaca, Jujuy, que acuden a los mercados fronteras afuera para conseguir alimentos más económicos, verduras y otros enseres, se dieron con la novedad de que directamente no recibían la moneda nacional.
Algunas casas de cambio ofrecían por 100 pesos argentinos 10 pesos bolivianos; esto hizo que los compradores desistan y retornen a La Quiaca sin adquirir nada.
El temor se instaló en esa comunidad boliviana a tal punto de hablar sobre “catástrofe económica”, guiados por las fake news de las redes sociales, o los medios afines al Gobierno nacional.
La repercusión fue a tal punto que los diferentes sectores comerciales de Villazón estaban preocupados de que el peso argentino siga devaluándose.
Sucede que el domingo, cuando se realizaron las elecciones Paso en Argentina, numerosas personas aprovecharon que iban a votar y durante la jornada cruzaron a Villazón para comprar, cuando el tipo de cambio era 100 pesos argentinos igual a 14.50 bolivianos.
En julio de 2018 por 100 pesos argentinos en las casas de cambio se obtenía más de 23 pesos bolivianos.
En la mañana de ayer con los pesos argentinos recibidos, los ciudadanos de Villazón quisieron comprar en La Quiaca y encontraron al sector comercial quiaqueño con las puertas cerradas.