La jueza de ejecución se aboca a estudiar “caso por caso” las solicitudes. Alerta por el incumplimiento de los protocolos sanitarios.
La jueza de Ejecución de Condena de la provincia, María Teresa Zacarías, se refirió a los pedidos de prisión domiciliaria y libertades asistidas solicitadas -en el marco de la pandemia de coronavirus- por los internos de la Unidad Penal 1.
La jueza aclaró que realiza el análisis de las situaciones de los internos que integran una lista de “recomendados” por el Servicio Penitenciario provincial, quienes estarían en condiciones de ser beneficiados con las medidas que, además, permitirían descomprimir la situación de superpoblación carcelaria en la unidad mencionada.
En este sentido, explicó los pasos que se deben cumplir para que el Juzgado resuelva la situación de cada detenido. El primero de ellos es que el abogado defensor o el imputado realicen el pedido de manera formal.
Además indicó: “Las prisiones domiciliarias tienen una serie de requisitos que están previstos por la Ley. Uno de ellos en el cumplimiento de los dos tercios de la pena. Para darle trámite debemos verificar y escuchar a la víctima del delito, es una necesidad conocer la realidad económica, social y de salud del interno. Este pronóstico de reinserción social, para saber qué posibilidad tiene de salir sin que vuelva a delinquir, y estos análisis se hacen interdisciplinariamente, explicó en una entrevista con Daniel Romero, en Radio Sudamericana. En este marco sostuvo que desde el SPP se había recibido “una lista sábana donde se mencionaban de manera genérica a los problemas (de los internos), como hipertensión arterial, problemas respiratorios y sin especificar”.
Estas situaciones son evaluadas luego de que la jueza en feria pidiera que le remitieran informes médicos, sociales y psicológicos, tras lo cual le mandaron referencias de unos 50 internos, de más de 100.
Alarma por los recaudos en la unidad penal
La Jueza de Ejecución de Condenas de Corrientes, María Teresa Zacarías, alertó respecto de situaciones que derivaron en un motín y en la posible propagación de coronavirus en la Unidad Penal de Corrientes.
“Lamento que se haya desatado esto, por imprudencias. No se respetaron los protocolos médicos ni el debido proceso”, sostuvo la magistrada.
En este contexto sostuvo: “Si se hubiesen respetado los protocolos sanitarios no habría una situación de penitenciarios contaminada”.
Además, indicó respecto a esto: “Me informaron que toda la gente que estuvo en el motín puede estar contaminada. Hubo gente que no corresponde a las fuerzas de seguridad, ni de los detenidos, y que estaban adentro, sin control”.
Fuente: Diario Norte