Tiene apenas 10 años pero demostró firmeza al negarse a resolver un problema de matemáticas, por considerar que ‘humillaba a las mujeres’. Para explicar su negativa, le escribió un mensaje a la docente, que comprendió la situación.
Naomi Pacheco, madre de Rhythm, descubrió que su hija de 10 años se había negado a contestar un problema de matemáticas y que se había encargado de escribir la justificación de su negativa al costado del ejercicio, para explicarle a la docente el por qué de su decisión.
Rhytm estudia en una primaria de Utah, en Estados Unidos y durante un examen tenía que responder un ejercicio donde se comparaba el peso de tres estudiantes y pedía a los estudiantes señalar quien era la estudiante más pesada. Ella escribió: “¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡QUÉ!!!!!!! Esto es ofensivo. Lo siento, no voy a corregir esto”.
La pequeña es una estudiante muy comprometida y temía que la maestra considerase que lo hacía porque no había estudiado. De este modo, le añadió nota aparte donde le explicó por qué había decidido no responder la pregunta. “No quiero ser grosera, pero no creo que el problema matemático haya sido muy bueno porque eso es juzgar el peso de las personas. Además, la razón por la que no quise responder es porque simplemente no creo que sea bueno. Con amor, Rhytm”.
Naomi le mostró el comunicado que enviaron desde la escuela al padre de Rhytm y ambos dijeron estar orgullosos de los principios de su pequeña. La madre incluso aseguró: “La maestra de Rhytm fue muy receptiva y manejó la situación con todo cuidado. Ella le dijo que entendía cómo estaría molesto por esto y que no tenía que escribir la respuesta”.
Cada vez más las niñas son conscientes de lo que implica el body shaming. En español, literalmente, el término implica avergonzar a alguien por su cuerpo. No hablamos de hacernos un cambio de maquillaje, ni de comprar nueva ropa. El vocablo alude a la crítica en la que caemos cuando le decimos a alguien que su cuerpo debe cambiar, aunque no tenga control sobre cómo luce.