Las autoridades habían decidido flexibilizar el aislamiento social obligatorio en la ciudad. Ahora se echarían atrás.
La comunidad de Necochea, que había pasado los últimos dos meses sin registrar casos positivos de coronavirus, se encuentra en estado de alerta. ¿El detonante? Un “baby shower” clandestino que arrojó seis nuevos contagios y el aislamiento de más de 70 personas.
Debido a que no se habían registrado casos de COVID-19 en los últimos 60 días, las autoridades habían decidido comenzar a flexibilizar el aislamiento social obligatorio en la ciudad, en una amplia reapertura comercial y paseos recreativos que incluían la playa. Pero esa decisión ahora está bajo revisión de las autoridades locales a partir del “baby shower” que en plena cuarentena reunió a más de 20 personas.
Entre los participantes de ese evento, se encontraban además pacientes de riesgo como la embarazada agasajada, varios menores de edad y personas mayores de 60 años. Una de las mujeres que estuvo en la fiesta, de 49 años, que trabaja en un hogar para ancianos, dio positivo en coronavirus, al igual que sus tres hijos (que también fueron a la reunión), su mamá, y un compañero de trabajo.
Según las autoridades municipales, abría tenido contacto con un hombre que llegó desde la ciudad de Buenos Aires luego de realizarse allí una intervención quirúrgica. Una vez de regreso a la ciudad -le señalaron a este portal- este último no respetó la cuarentena obligatoria de 14 días.
La secretaria de Salud Ruth Kalle contó que la infectada “trabaja los días domingo en una residencia de ancianos donde residen siete adultos mayores”, lugar en donde ahora se realizaron hisopados y se esperan los resultados para determinar el alcance de contagios en la zona.
Según las autoridades locales, la fiesta pudo haber propagado aún más la red de contagios, por lo que ahora se está haciendo un estricto seguimiento de los participantes del “baby shower” y de sus contactos más estrechos para reducir el margen de riesgo de expansión del virus.
Por otra parte, en el geriátrico donde trabaja la mujer se detectaron otros casos, como el de otro empleado del lugar. En total, son seis los nuevos infectados por coronavirus en Necochea: los dos empleados del hogar para ancianos, los tres hijos de la mujer y la madre de esta última. Por ahora, se esperan los resultados de 30 hisopados, mientras que más de 70 personas fueron identificadas y aisladas de forma preventiva.
Los últimos seis casos surgieron de los primeros 11 análisis realizados en el Instituto Nacional de Epidemiología, de Mar del Plata, que depende del Ministerio de Salud de la Nación, por lo que se espera con mucha preocupación el resto de los resultados y ya se remitieron más de 30 hisopados.
El intendente local Arutro Rojas hizo referencia a las consecuencias que el incidente podría traerle a la ciudad: “Veníamos de una etapa de flexibilización en algunas actividades y comunicaremos en el momento adecuado si se toma alguna determinación de retroceso o no de alguna actividad”.
En ese sentido, el funcionario aclaró que “en principio vamos a dejar en pausa el pedido de nuevas flexibilizaciones de diferentes sectores y en el caso de que tengamos que retroceder en alguna cuestión lo comunicaremos de la misma manera”.
Hasta la confirmación de estos nuevos seis casos, Necochea sólo registraba tres contagios de COVID-19. El último caso databa del 26 de marzo, razón por la cual se había implementado la flexibilización. Según contó Kallé, el encuentro social no estaba permitido y remarcó que los involucrados en el festejo ocultaron la cantidad real de personas que asistieron al dar su testimonio en la investigación.
“Están asintomáticos, con lo cual es probable que den negativo cuando midamos la carga viral. Pero de todas maneras, desde ayer y hasta 14 días tienen que guardar aislamiento para ver si aparece algún síntoma. Hay otro dato más, la mujer contagiada tiene una nuera que trabaja en una residencia donde viven chicos con discapacidad, a quienes también aislamos, al igual que al personal”, sentenció la Secretaria de Salud.