La experiencia no tiene precedentes. Un restaurante sirve agua potable reciclada de los inodoros. No sólo eso. El agua que se utiliza para hacer la cerveza es la misma que los clientes utilizaron para lavarse las manos. El hielo, por ejemplo, se forma con la misma agua con la que anteriormente se lavó la verdura.

El agua es la misma que cualquier otra agua potable, no tiene ni olor ni sabor. Y eso fue posible gracias a un desarrollo tecnológico que introdujo el restaurante Gust’eaux de Kuurne, un municipio de Flandes, en Bélgica?.

Como en esa localidad no tenían agua potable ni tenía conexión a la red, no quedó otra solución que idear un sistema de circuito cerrado para resolver el problema.

Gracias a este sistema de reciclaje de agua único, el líquido del inodoro se “limpia” inicialmente con fertilizante para plantas, luego una parte se mezcla con agua de lluvia recolectada y se usa para descargar los inodoros, mientras que el resto se pasa por una serie de procesos de purificación que lo hacen indistinguible del agua de la canilla.

Mediante un complejo sistema de purificación de cinco pasos, Gust’eaux es capaz de convertir sus aguas residuales en un agua tan pura que tiene que ser enriquecida con minerales antes de ser servida a los clientes.

El posteo en Facebook del restaurante de Bélgica con su inédito programa de reciclado.

“El agua es demasiado pura para ser potable, por lo que agregamos minerales para que sea más saludable”, manifestó un representante de Gust’eaux al canal de noticias belga VRT News.

Según un medio local, el mismo sistema de purificación de agua se utiliza para proporcionar agua potable a comunidades aisladas, pero la experiencia tuvo una enorme repercusión.

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