Si tenes poco tiempo, te lo resumimos:
- El Presidente llegaría a Corrientes el 1 de agosto y encabezaría actividades políticas el 2.
- La visita forma parte de una grilla de actividades proselitistas de cara a las PASO del 11 de agosto.
- En 2017, el Primer Mandatario estuvo en Corrientes en la fecha prevista para beber el brebaje. Lo hizo pero no le agradó su sabor.
Si bien no hay confirmación oficial, el presidente Mauricio Macri y su compañero de fórmula Miguel Ángel Pichetto estarían en Corrientes el próximo 1 de agosto. La dupla oficialista haría noche en nuestra ciudad y encabezaría una serie de actividades el viernes 2. De esta manera, repetiría la tradición de tomar caña con ruda, que ya lo hizo en 2017, que – según la creencia popular – le dio suerte en las elecciones de aquel año.
La llegada de Macri a Corrientes forma parte una grilla de actividades electorales de cara a las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto. De acuerdo a fuentes de Presidencia de la Nación consultadas por 7Corrientes, el Presidente llegaría a nuestra ciudad proveniente de Salta.
De todas maneras, el cronograma de actividades todavía sigue en análisis. Por ello, funcionarios nacionales y provinciales prefirieron aún no adelantar ni la confirmación oficial ni los actos o encuentros que se desarrollarán.
“Comprenderás que estamos en plena campaña y con las labores propias del Ejecutivo Nacional. Por eso el 1 de agosto todavía queda muy lejos para confirmaciones”, apuntó la fuente de Presidencia consultada.
Ese mismo día, pero en 2017, Macri encabezó un acto en el club San Martín en el que respaldó las candidaturas de Encuentro por Corrientes + Cambiemos (nombre utilizado por aquel entonces por la alianza oficialista a nivel nacional hoy devenido en Juntos por el Cambio).
Ricardo Colombi, el radical Gobernador de Corrientes en 2017, le entregó en mano un vaso con caña con ruda “para alejar los maleficios y atraer la salud y la suerte”. El Presidente bebió el brebaje pero no pudo ocultar que no le gustó. De todas maneras, tomó hasta el último sorbo.
Seguramente la caña con ruda le dio suerte a Macri: ese año ganó las elecciones y fue el momento de mayor popularidad en su gestión.