Su esposa, conocida en el barrio como “La tabla” (se ve que no le gustaba), no aguantó más. Desde hacía años soñaba con modificar su cuerpo, que tanto la acomplejaba. Y cuando vio la oportunidad, no la dejó pasar. Después de todo, habrá pensado la mujer, no sólo lo hacía por ella.
Así fue que hace unos días, esta mujer de 35 años de un barrio humilde de la Juárez 3, agarró los 70 mil pesos que su marido había juntado con su flamante aguinaldo y se fue a Monterrey a operarse las lolas y la cola.
El pobre marido, que apodan “El mofles”, se enteró unos días después, cuando su esposa le envió una foto de su “nuevo” cuerpo y un texto donde le explicaba por qué se había robado la plata, que estaba destinada para tener otro hijo.
“Lo siento mucho cariño, pero mis tetas son más importantes que nada. Tener otro hijo puede esperar, yo llevo toda una vida acomplejada con mi cuerpo. Espero que lo entiendas, nos vemos a la vuelta amor. Un besito, te quiero”, le escribió.
Sin embargo, parece que el hombre, también de 35 años, no lo entendió. Porque fue a la comisaría e hizo la denuncia del robo de los 70 mil pesos.
El denunciante les explicó a los policías que después de 4 años de matrimonio y 2 hijos, ella insistía que merecía esa operación “para verse mejor”, pero contó que esta desafortunada acción “le ha jodido la vida”.
Según el testimonio del hombre, el dinero estaba destinado a tener un tercer hijo en este próximo 2020. Y acompañó la denuncia con copias de los mensajes de su esposa, y fotos donde se la veía bajando del camión de Monterrey, y justo antes de entrar a la clínica.