Estados Unidos sufre en forma recurrente tragedias en colegios por los mass shootings (cuando un atacante asesina a por lo menos tres personas con el uso de armas) que provocan la muerte decenas de alumnos por año. Para evitarlo, algunos colegios están probando prevenir estos sucesos con tecnología de reconocimiento facial.

Según la revista Wired, al menos ocho colegios norteamericanos instalaron sistemas de cámaras con este tipo de software, que permite identificar alumnos o intrusos dentro de los establecimientos.

Si bien el objetivo que se propusieron para instalar el reconocimiento facial es prevenir tiroteos, ya se instaló un debate sobre si es utilizado como herramienta de control y vigilancia.

Cómo funciona el sistema

Para que este sistema funcione, las instituciones cargan una base de datos con información de los jóvenes en forma manual con perfiles de sospechosos, supuestos estudiantes problemáticas o visitantes no deseados.

Esta información inicial de cada alumno tiene la polémica característica de estar basada en información de redes sociales, con fotos extraídas de Facebook e Instagram. El resto de la lista de vigilancia es configurada por las autoridades del colegio por denuncias públicas y anónimas, así como quejas de profesores, otros estudiantes y hasta padres de familia.

La nota cita el ejemplo de un colegio en Missouri, dónde instalaron un sistema de 200.000 dólares que vigila a 600 estudiantes y profesores. Todo lo que captan las cámaras se guarda en un servidor dentro del colegio y se envía a las autoridades, donde afirman que tras 30 días es borrado.

En Spring Hill, Texas, el sistema de vigilancia analiza los movimientos de 1900 estudiantes. Inclusive los contenidos que publican en las redes sociales.

En Europa y en China

Una secundaria en el norte de Suecia fue multada con 200.000 coronas suecas —unos 18.500 euros— por realizar una prueba piloto con cámaras con reconocimiento facial sin autorización gubernamental. Habían colocado las cámaras para monitorear la asistencia a clases de 22 alumnos, que previamente habían dado su consentimiento.

En varias escuelas de China también cuentan con sistemas de reconocimiento facial en sus puertas para controlar el presentismo de los alumnos. Y van mucho más allá. Utilizan uniformes inteligentes con el fin de combatir el ausentismo escolar, según informa el diario oficial Global Times. La prenda permite a los profesores detectar la ubicación de los alumnos o activar una alarma cuando un estudiante se queda dormido en clase.

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